Bienvenido Abril,
Con sus días lluviosos y soleados, con una Primavera que no termina de arrancar, y la energía y las emociones invadidas por cierta incertidumbre que se palpa en el ámbiente. STOP. Todo está bien, todo estará bien. Nosotros construimos el camino, así que fuera miedos, porque lo que depende de nosotras/os lo vamos a hacer muy bien desde el ser, desde la esencia de cada uno, soltando el miedo a lo que será, miremos dentro…fuera hay demasiado ruido que distrae. CONFÍA. Y si te cuesta, te lo tatúas. CONFÏA en tí.
Hoy, leyendo a Thich Nhat Hanh, maestro de maestros, reflexionaba sobre algo que me ha parecido muy cierto: ¿Hasta que punto las personas estamos con los demás de verdad, o «para sacar algo». Vivimos en la nueva cultura del «para qué», del propósito, y eso es positivo, pero hasta que punto en nuestro afán continuo de desvirtuar lo puro, hemos convenido que cualquier persona es un cajero. automático, no de dinero, pero si de «oportunidades», «aprendizaje», «ayuda», o»posibilidad de algo», que no digo que esté mal, (vivo en ese camino de que todo me sea funcional y cualquier cosa que suceda, pase o viva valga para algo), pero he entrado en conflicto al entender que eso es lo más alejado que hay a vivir en el momento presente.
Vivir en Presencia pura es observar lo que sucede sin más, sin matices, simplemente estar ahí. Todo es belleza presente: conducir, ir al super, comprar lechugas, … y sin embargo aquí estoy, escribiéndote esperando algo de tí: que te guste, que me devuelvas respuesta, que te inspire….maldita mente pro objetivos! jajajaja… es broma, con pinceladas de realidad.
La única de VIVIR es viviendo, y para eso toca regresar a nosotros, y cuando hallemos paz y alegría en nuestro interior, seremos capaces de darnos por un bien común desde la generosidad absoluta del NO ESPERAR NADA. a cambio.
Vivamos pues.
Os dejo una clase de Yin Yoga que acabo de subir, porque creo que es de las prácticas que más me traen al momento presente, y me apetece compartirlo por si te sirve, aunque sigo teniendo mis dudas desde que lugar lo hago: si de modo desinteresado, o si en mi cerebro, hay una consecución de algo. Seguiré indagando en mí, mientras, te deseo desde lo más profundo de mi alma eso sí: PAZ, AMOR, y ALEGRÍA.
NAMASTÉ.
Te dejo un básico de siempre que lleva todo este poquito día 1 de Abril vivido en mi mente, el gran Sabina.